El Servicio de Cirugía Vascular del Hospital Universitario de Cabueñes ha compartido sus conocimientos sobre nuevas técnicas de revascularización extrema con expertos internacionales. El personal de la unidad ha impartido un curso sobre estos procedimientos, que permiten evitar amputaciones en las extremidades inferiores en pacientes con una completa patología arterial.
En el centro de referencia del área sanitaria V, estos tratamientos innovadores se han convertido en una práctica habitual, lo que permite ofrecer a los pacientes una atención que no era posible con las técnicas habituales. Los buenos resultados asistenciales y la dilatada trayectoria de este servicio ha despertado el interés de cirujanos de países como México y Colombia, que han participado en la formación desarrollada esta semana.
El interés del curso radica en el uso de técnicas mínimamente invasivas, más seguras para los pacientes y con un tiempo de recuperación menor. De este modo, se da respuesta al grave problema de la isquemia de miembros inferiores. Entre las diferentes operaciones, destaca el abordaje bidireccional, que consiste en realizar una punción de arterias a nivel del pie para usarlas como ruta de acceso a zonas más próximas a las lesiones.
Durante las dos sesiones de trabajo, dirigidas por miembros del equipo del centro gijonés, se han empleado los equipamientos y dispositivos más avanzados de los que dispone la cirugía vascular en la actualidad.
El servicio de Cabuñes cuenta con una dilatada trayectoria y participa además en diversos proyectos de innovación e investigación. Entre ellos destaca el empleo de dispositivos de última generación, como ondas de choque, para romper y desintegrar depósitos calcificados dentro de las arterias, lo que se conoce como litotricia intravascular para troncos distales. También, sobresale la técnica de la aterectomía, para eliminar placas de ateroma en las arterias. Ambas técnicas permiten una modificación de las lesiones que de no ser tratadas podrían conllevar la amputación de la extremidad.
En el centro hospitalario gijonés también se aplican tratamientos pioneros en el conjunto del país, como el SPUR stent, un dispositivo que permite su retirada tras la implantación y que se traduce en una mejor absorción de fármacos en terapias, así como la ventaja de no dejar en el cuerpo de los pacientes material protésico de forma definitiva.
Por último, también se aplican las técnicas de imagen, como la ecografía intravascular, ampliamente utilizada en patología coronaria, que permiten una correcta valoración de las lesiones, así como la mejora de los resultados tras el tratamiento.
Estas actividades de formación se enmarcan dentro de la estrategia de mejora continua de calidad de la actividad asistencial, de investigación y docencia.