La XXXI edición de LibrOviedo ha concluido este domingo con un balance muy positivo tanto en participación como en resultados. Durante cinco días, del 21 al 25 de mayo, miles de visitantes pasaron por la calle Pelayo, nueva ubicación de la feria, que ha sustituido este año a la tradicional Plaza de Trascorrales.
El cambio de escenario ha resultado un acierto, según coinciden expositores y organización. Las ventas se han incrementado en un 20% respecto al año pasado, superando los 2.500 ejemplares vendidos. Además, la gran afluencia de público y la buena acogida de las actividades programadas han reforzado el papel de LibrOviedo como cita imprescindible en el calendario cultural ovetense.
Desde la Asociación de Libreros de Oviedo, organizadora del evento, se muestran satisfechos por la alta participación y por la valoración mayoritariamente positiva que han trasladado los libreros, tanto por el nuevo formato como por la duración de la feria.
En cuanto a los títulos más vendidos, tres autoras han liderado las preferencias del público:
- Lo que oculta la tierra, de Leticia Sierra
- Mi nombre es Emilia del Valle, de Isabel Allende
- Cuaderno ilustrado de Asturias, de Pilar Gutiérrez
La organización ya trabaja en próximas ediciones con la vista puesta en seguir consolidando este evento literario, que ha demostrado una vez más la vitalidad del sector del libro y el interés del público asturiano por la lectura.