La vicepresidenta del Gobierno de Asturias, Gimena Llamedo, ha defendido hoy en la Junta General la Ley Simplifica, una ambiciosa reforma que actualiza la normativa administrativa para hacerla más ágil, eficaz y centrada en las personas. “Este texto es una herramienta clave para reducir la burocracia con hechos, no con titulares, y para demostrar que una Administración más simple también puede ser más justa, más eficaz y más cercana”, ha valorado Llamedo.
“La ciudadanía merece una Administración útil, rápida y moderna, y esta ley nos permite avanzar hacia ese modelo con garantías y seguridad jurídica. Es una reforma clave para que la filosofía simplificadora prenda en los procesos administrativos y una ocasión ineludible para demostrar a la ciudadanía que sus instituciones son capaces de atender sus demandas”, ha explicado la titular de Presidencia sobre una ley que tiene un triple objetivo: reducir, facilitar y agilizar los trámites administrativos.
Esta reforma legislativa se ha fraguado en un contexto de escucha activa y trabajo conjunto, tal y como ha destacado la vicepresidenta, quien ha enmarcado la Ley Simplifica en uno de los objetivos estratégicos del Ejecutivo autonómico para impulsar un modelo de Administración pública más ágil, eficiente y sencillo, que ofrezca respuestas útiles a la Asturias del siglo XXI. “Es una ley construida entre todos y pensada para todos, un instrumento real para que Asturias funcione mejor”, ha añadido Llamedo.
Entre las novedades que incluye la ley destacan las siguientes:
La solicitud y concesión de ayudas públicas durante los 365 días del año.
El refuerzo del principio de “una única vez” a través de la Administración digital, que reduce el papeleo.
La regulación de la figura de los agentes habilitados, que podrán realizar trámites en nombre de otras personas.
Avances en la automatización de gestiones y el uso de la inteligencia artificial, siempre con control humano y responsabilidad de gestión.
Medidas para dar nuevos usos, compatibles y respetuosos, a inmuebles como hórreos, paneras y calabozos.
Durante su intervención en el parlamento, la vicepresidenta ha apelado al compromiso de los grupos parlamentarios para que el proyecto salga adelante con el mayor consenso posible, con el propósito de “darle a Asturias lo que merece”. “No hay líneas rojas, más que las derivadas del ordenamiento jurídico cuando hablamos de simplificar”, ha asegurado.
Llamedo ha confirmado que esta reforma será el punto de partida de una serie de leyes estructurales, como la futura Ley de Hacienda o la Ley de Organización e Integridad del Territorio de Asturias (LOITA), y ha insistido en que la simplificación no es una meta, sino un camino permanente de mejora continua.