La Fiscalía del Principado de Asturias ha iniciado diligencias tras la denuncia presentada por la Coordinadora Ecoloxista d’Asturies contra la Consejería de Medio Rural y Cohesión Territorial del Gobierno autonómico, a raíz de varias quemas autorizadas en montes de Parres, Cudillero y Pravia durante los meses de abril y mayo.
Según la Coordinadora, las quemas se llevaron a cabo con el objetivo de regenerar pastos, pero se habrían ejecutado vulnerando las resoluciones que las regulan, superando ampliamente las superficies permitidas. En Parres, por ejemplo, se autorizó una quema de 200 metros cuadrados y se habrían quemado cerca de 40.000 metros cuadrados, mientras que entre Cudillero y Pravia se habrían afectado unas 60 hectáreas de monte.
Las organizaciones ecologistas alertan de que estas prácticas suponen una grave alteración de los ecosistemas, especialmente por haberse realizado en plena época reproductiva de numerosas especies de fauna silvestre. Las quemas, subrayan, generan una fuerte erosión del suelo y perturban gravemente a aves, mamíferos, reptiles e insectos que nidifican entre marzo y julio.
La denuncia recuerda que, según las propias resoluciones de la Consejería, las quemas deben realizarse preferentemente entre octubre y marzo, y que la Ley 42/2007 del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad prohíbe expresamente causar daños o molestias a la fauna silvestre. También apunta a posibles responsabilidades penales, recogidas en el artículo 334 del Código Penal, por dificultar la reproducción o migración de especies protegidas.
Entre las especies que podrían haberse visto afectadas se encuentran aves como el cuco común, el petirrojo, el mirlo, la curruca capirotada o la collalba gris, todas ellas protegidas por la legislación vigente.
La Coordinadora Ecoloxista confía en que la investigación judicial esclarezca lo sucedido y que este tipo de actuaciones contrarias a la conservación ambiental sean finalmente erradicadas.