La consejera de Transición Ecológica, Industria y Desarrollo Económico, Nieves Roqueñí, ha calificado de irrenunciable la instalación de una planta de reducción de mineral de hierro (DRI) en la cabecera de la siderurgia asturiana y en ese objetivo están trabajando el Gobierno de Asturias y el Ministerio de Industria y Turismo. «Tanto el Gobierno de Asturias como el Gobierno de España estamos trabajando para que el horno alto sea sustituido por una planta de DRI, bien por ArcelorMittal o por otra empresa que pueda hacer esa inversión para vender el DRI a ArcelorMittal», ha explicado la consejera.
A la espera de las gestiones y trámites que se vayan realizando para garantizar la instalación del DRI en Asturias, un proyecto que la consejera considera «fundamental» para la producción de acero verde en Asturias, Roqueñí ha puesto el foco en la transformación de la industria y en «los buenos proyectos» presentados por las empresas para su desarrollo en la región.
«Hay que ser conscientes de que toda la industria asturiana está inmersa en un proceso de transformación y tenemos que aprovechar el momento porque hay muy buenos proyectos, las empresas saben lo que tienen que hacer para descarbonizar y debemos aprovechar la financiación disponible con los fondos europeos del Plan de Recuperación y el Fondo de Transición Justa. La industria asturiana está preparada para esta transformación y el momento es ahora», ha concluido la consejera.
